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Royal Ontario Museum
Photo By: Juan M. Trujillo

Seré siempre el que no nació para esto,

Seré siempre sólo el que tenía cualidades;

Seré siempre el que esperó que le abriesen la puerta al pie

de una pared sin puerta.

F. Pessoa

Regreso de este viaje, como el rumor de oleaje

a la caracola que sostiene la puerta de mi niñez.

No es abandono...Es solo cansancio de ver la silla

vacía de las cosas, ahí en frente...

me fui un día, revuelto en la arena de la erosión,

tiempo de mares, reloj de vastedad...

extensión agotada; cuando en cada

rostro reconocí, otros rostros de mi pasado 

que me llamaban en cada esquina, -reflejos del tormento-...

Escucha esos pasos dejados en el recorrido:

las salvas al repentizar la duración...

hoy me llaman a reparar el error con recuerdos,

y el mundo se contempla desde cualquier lejanía.

-Niño compón el zapato.

Gusano en transmutación a la conciencia:

estuario en dolor aleatorio, inercia del tiempo inútil,

espacio cercado por la repetición del cansancio.

¿y si esto que nos fue dado es una parálisis

un sumidero?.

¿Ser extranjero?¿Como? si habito demasiado

rápido para la novedad de lo que ha cambiado

sin mi, y la periferia es una constante, un punto geográfico

absconto de la multitud, sin el ruido del afán.

No; yo no pertenecí a este mundo porque

mi alumbramiento fue traspié, evento

de la progresión de alfabetos, antigüedad de la

orgía de la vida...

La humanidad despierta en su constante maníaca,

-Niño cuidado...

-Si.

Hubiera preferido esconderme desde mi infancia.